Por Nataly, Profesora de Arte.

El 28 de junio, 23 alumnos y 2 maestros nos fuimos a Italia, durante tres semanas el objetivo fue seguir un programa académico dedicado a la historia del arte y el idioma italiano. Esto, con las actividades programadas de la “Scoula Leonardo Da Vinci” quienes organizaron un programa que comprendió visitas dentro y fuera de Florencia, para recorrer lugares significativos donde pudiéramos reconocer los contenidos abordados en el programa, y en las tardes los alumnos asistieron a clases de italiano.

Durante tres semanas, los alumnos tuvieron la oportunidad de acercarse al arte no sólo con dispositivas, libros o visitas virtuales, sino de manera real, en los sitios donde fueron hechas, frente a construcciones o lugares que le dieron inspiración a sus creadores. 

Fue una gran oportunidad el que hayan podido recibir información y ver las obras originales, ninguna imagen reproducida podría sustituir la experiencia estética que se genera frente a la pieza original con sus colores, dimensiones y materialidad real.

Alumnos y maestros estuvimos alojados con familias italianas, lo que también fue un plus en la experiencia ya que conocimos de primera mano sus costumbres, su comida y tuvimos la oportunidad de practicar lo aprendido en la clase de italiano.

Por las tardes hubo oportunidad de recorrer de manera libre Florencia y entrar a lugares o museos que estaban fuera del programa, algunos alumnos aprovecharon para conocer el museo de Gucci, Leonardo Da Vinci, La casa de Dante Aligieri, el Museo de Ciencias de Galileo, entre otros. En otras ocasiones otros más optaron por otros eventos, como conciertos de ópera. Los fines de semana se destinaron para salir, por lo que estuvimos en otros lugares de la Toscana (Fiesole, Pisa, Siena, Lucca) y Venecia.

Este viaje le permitió a nuestros alumnos tener unas vacaciones diferentes, donde no sólo llegaron a lugares y se tomaron fotos, sino que de la mano de Yuritza (nuestra maestra), desmenuzaron información y tuvieron acceso a una gran experiencia, pudieron ver más allá de lo que las características físicas de un lugar les puede ofrecer: experimentaron el sitio que visitaron de una manera amable y constructiva con su vivencia y el lugar que visitaron.

Aunque las vacaciones son para descansar, estoy segura que quienes acompañamos a los alumnos en esta experiencia, hemos quedado contentos de compartir con nuestra comunidad estudiantil un verano como este, donde el esfuerzo y el cuidado llevados más allá del calendario escolar, se traducen en aprendizajes valiosos para todos.

Agradecemos a los padres de familia y a las autoridades de la escuela, que confiaron en Jaime, Edgardo y en mí para llevar a cabo este proyecto académico y esperamos que este tipo de actividades se sigan haciendo. 

En este viaje los alumnos proyectaron nuestra visión de un egresado de Lancaster, mostraron cualidades humanas que esperamos sigan poniendo en práctica en cualquier contexto.

X